Reflexionan la desaparición de los 43 normalistas a 8 años de Ayotzinapa en la XXII FIL del Zócalo
Corresponsales | Revista TMX | Ciudad de México
Ciudad de México.- A través de la mesa política “A 8 años de la noche de Iguala”, las y los asistentes a la XXII Feria Internacional del Libro (FIL) del Zócalo recordaron en el séptimo día de jornada literaria las consecuencias de aquella desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, ocurrida la noche del 26 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.
La charla realizada en el Foro Ricardo Flores Magón contó con la participación del normalista Manuel Vázquez Arellano, quien tras los acontecimientos utilizó el pseudónimo de Omar García para evitar represalias, en compañía del periodista y productor Epigmenio Ibarra, quienes coincidieron en que este crimen de Estado fue la gota que despertó la conciencia social y el hartazgo político que encaminó la apuesta por otra alternativa: la cuarta transformación.
“Ayotzinapa está lleno de verdades incómodas y la más incómoda es que fue el Ejército y el Estado, fueron autoridades civiles, policías y militares las que se llevaron a nuestros compañeros. En este momento se ha reconocido por parte del gobierno federal y del Estado que fue un crimen de Estado, y se ha atrevido a más, a decir aquello que no querían decir los anteriores, que probablemente nuestros compañeros no estén vivos ya y eso no lo querían decir porque implica un costo político”, compartió Vázquez Arellano.
El sobreviviente y actual diputado federal por Morena recordó y agradeció la solidaridad del pueblo mexicano con la causa Ayotzinapa que permitió marcar un alto a las represiones del gobierno al impulsar una colectividad organizada que dio cara al manejo mediático que quiso instalar el gobierno de Enrique Peña Nieto acusando a los estudiantes de estar coludidos con el crimen organizado.
“Fue el último clavo en el ataúd del viejo régimen”, expresó Ibarra y prosiguió “¿por qué no se encuentra la verdad? Porque la desaparecieron, ¿Quiénes?, todo el aparato del Estado y todo el poder mediático y los narcos. El Estado mexicano hizo imposible encontrar a los 43, desapareció la verdad y negó la justicia, encubrió a los criminales y participó en el crimen”, dijo el también director general de la Compañía Argos Comunicación.
Asimismo, a ocho años de distancia de la desaparición, el joven abogado, antes vocero de Ayotzinapa, quien decidió cambiar su rumbo de maestro rural para entender cómo funciona el Estado, compartió las graves fracturas que ha tenido el movimiento desde su consideración como “traidor” por virar a otros rumbos sus intereses profesionales, el enfrentamiento entre familiares de las víctimas y sobrevivientes por considerarlos responsables, así como la auto inculpación de padres y madres que creen haber cometido un error al hacer estudiar a sus hijos.
“Se reprime a los estudiantes para dar un escarmiento, pero más que al estudiante, a quien se le trata de dar un escarmiento es a la sociedad en su conjunto, porque se está mandando el siguiente mensaje: ¡Si haces lo mismo que hicieron los de Ayotzinapa te vamos a desaparecer!”, compartió Vázquez Arellano, originario de la Sierra de Guerrero, quien hizo un llamado a mantener el apoyo con los familiares de las víctimas.
La FIL Zócalo mantiene preparada una gran oferta de actividades hasta el 16 de octubre, periodo en el que se ofrecen presentaciones de libros, conferencias, homenajes, mesas de diálogo, proyecciones de cine y conciertos, acompañados de la participación de 320 expositores y alrededor de 500 sellos editoriales, incluida una gran venta nocturna el viernes 14 de octubre.